sábado, 28 de diciembre de 2013

ALIMENTACIÓN INFANTIL PARA UNOS DIENTES SANOS.

Las siguientes sugerencias han sido preparadas para ayudar al normal desarrollo de los hábitos en las comidas y salud de los dientes de los niños, Estas recomendaciones han sido realizadas para ser practicadas en la vida diaria familiar. Estudios científicos demuestran que un exceso de azúcar en la dieta, no sólo contribuye al desarrollo de la enfermedad dental, sino también aumenta el riesgo de diabetes, obesidad, hipertensión arterial y otras patologías de tipo cardiaco.

El aprender hábitos de nutrición, es responsabilidad de la familia; la participación de los padres en esta experiencia educativa es esencial y requiere el conocimiento de una serie de guias de control de dieta. Los niños solo cambian de hábitos si los padres cambian los suyos; estas guias pueden beneficiar a toda la familia si se siguen sinceramente.....

Evitar si es posible:

  • Dar el biberón al niño antes y durante la siesta.
  • Dar biberones prolongados con bebidas azucaradas (bebidas carbónicas con sabores de frutas, formulas con mezcla de zumos de fruta y leche...)
  • Mantener el biberón en la boca del niño mientras duerme.
  • Tomar bebidas azucaradas durante las comidas principales (almuerzo escolar, comida , merienda y cena) y entre horas.
  • Acceso ilimitado de zumos envasados.
  • Dulces entre comidas (caramelos, helados pasteles, cereales azucarados sin leche.....)
  • Postres dulces después de comidas y cenas.
  • Premiar al niño con dulces.

Es IMPORTANTE saber que el factor más importante en el desarrollo de la caries dental es la frecuencia de consumo de azúcar más que la cantidad.

martes, 10 de diciembre de 2013

TALLER DE HIGIENE BUCODENTAL INFANTIL


Es en la edad infantil cuando debemos implantar  rutinas adecuadas para que los pequeños las interioricen y no tengan problemas relacionados con la salud bucal . Desde la clínica dental y en colaboración con la familia se puede fomentar estos buenos hábitos .
Una buena higiene bucal infantil junto a la adquisición del hábito de su mantenimiento, comportará que el adulto pueda conservar sus dientes para toda la vida.

Objetivos:

Que los niños...
·    Se familiaricen con el personal y las instalaciones de la clínica dental.
·    Conozcan el instrumental y los equipos empleados en Odontología.
·    Aprendan acerca de la estructura del diente.
·    Diferencien los dientes temporales de los definitivos.
·    Aprendan la técnica de cepillado.
·    Sepan clasificar los alimentos  en saludables o perjudiciales para la dentadura.
·    Adopten estilos de vida más saludables.
·   Cada vez sean más autónomos en el cuidado de su salud. Favoreciendo tanto el auto-cuidado como la relación de ayuda.

Metodología:


·    Hablamos  con los niños sobre la importancia de mantener una buena higiene bucal.

·    Les mostramos las instalaciones, los equipos y el instrumental  clínico.
·    Utilizamos material de apoyo para explicarles  la composición de nuestra dentadura  y la estructura del diente.
·    Mediante el juego les enseñamos a clasificar los alimentos que sean “amigos de nuestra sonrisa”
·    Utilizamos material audiovisual para apoyar nuestras explicaciones.
·     Finalmente practicamos con ellos la técnica de cepillado e higiene.

Los talleres están a cargo de nuestra higienista dental y estudiante de magisterio, Jessica Vivó . Con el asesoramiento de nuestra Odontopediatra, Dra Marta Ribelles.

sábado, 7 de diciembre de 2013

EL MIEDO DE LOS NIÑOS AL DENTISTA

¿Por qué los niños tiene miedo al dentista?

Tener miedo al dentista en un niño es una reacción perfectamente natural. La clínica dental puede ser un lugar bastante extraño para él. Los niños se sienten más cómodos cuando conocen  con precisión su entorno y lo que sucede en él.  Y si el dentista es nuevo y desconocido, entonces no es sorprendente que podría tener un poco de miedo. Además,  en la práctica odontológica, es bastante común  observar la gran preocupación de los padres con respecto a cómo evitar el miedo al odontólogo en sus hijos. Sobre todo cuando es su primera visita al dentista. A veces es tanta la ansiedad o miedo de los padres que se pueden producir  situaciones como las siguientes:
  • Que el  hijo adquiera esta actitud  mediante relatos de experiencias traumática de los propios padres
  • Que los padres retarden la primera visita a cuando el niño está en una edad avanzada. 

¿Cómo enfrentar el miedo al dentista en los niños?

·         Las visitas al dentista deben realizarse periódicamente, de tal forma que se realice un tratamiento preventivo y evitar un tratamiento curativo, que en ocasiones puede ser doloroso. 
·         Es preferible que la primera visita sea con un especialista en Odontopediatría ya que ellos tienen las herramientas y conocimientos necesarios de cómo presentar esta nueva situación a los niños, además que la manera de acercarse a ellos es distinta y el niño la percibe de forma más amigable.
·         Ayudarle a mantener una salud bucal adecuada, siendo necesario el cepillado de los dientes después de cada comida y sobre todo por la noche antes de dormir.
·         Llevarle desde muy pequeño al dentista para familiarizarle con el consultorio, con el dentista y con el instrumental.
·         No hagas comentarios desagradables de tu experiencia con el dentista delante de tus hijos.
·         Y finalmente, algo fundamental es que  debes tener plena confianza en el odontólogo y dejar que él maneje la situación.

La visita al odontopediatra

En la primera sesión con el dentista se examinarán cada uno de los dientes y muelas del niño; revisando el color, tonalidad, dureza, si presenta manchas, si presenta caries o algún problema; en algunas ocasiones necesitará tomar rayos X, hacer una limpieza, un tratamiento, etc; dependiendo del diagnóstico

Encontrar un odontopediatra

Consulta la página de la S. E. O. P. (Sociedad Española de Odontopediatría) para encontrar un odontopediatra cerca de tu domicilio. Si decides acudir a nuestra consulta, la Doctora Marta Ribelles te atenderá gustosamente. Solo tienes que pedir cita.

Dra. Marta Ribelles LLop
Licenciada en odontología por la Universidad Internacional de Cataluña (2004).
Master en odontopediatría por la Universidad Internacional de Cataluña (2005-2007).
Doctora en odontología por la Universidad Internacional de Cataluña (2007-2009).
Profesora Titular de odontopediatría de la UCH-CEU.
Co-directora de la especialidad de odontopediatría de la UCH-CEU.
Miembro de la SEOP.

martes, 3 de diciembre de 2013

MI HIJO SE CHUPA EL DEDO...... ¿CUÁNDO ES UN PROBLEMA?

¿Por qué los niños se chupan los dedos?


La succión es un reflejo normal, natural.
El afán por succionar, fuera de la alimentación, es una necesidad que en mayor o menor medida todos los bebés tienen que satisfacer
  • Les alivia. En situaciones de dolor, enfermedad o malestar.
  • Les entretiene. Este será uno de sus pasatiempos favoritos.
  • Les relaja. Es un buen tranquilizante y le ayuda a conciliar el sueño.
  • Les da seguridad.

¿Cuándo es un problema?

Por lo general, la mayoría de los niños dejan este hábito sin ayuda entre los 2 y los 4 años, . Pero algunos lo mantienen hasta los 5, 6 o incluso 8 años. Por lo que no debe preocupar a menos que la succión:

- Sea muy intensa.
Se prolongue por muchas horas en el día.
- Se prolongue toda la noche y no sólo mientras concilia el sueño.
- Haya provocado cambios en la posición de los dientes, la boca o los labios.

¿Cuáles son los efectos negativos de chuparse el dedo?

1. A nivel óseo: puede producir displasias esqueléticas y malposiciones dentarias en el niño en crecimiento. Se  puede observar:
· Boca abierta normalmente.
· Persistencia de deglución infantil. Al existir un espacio entre los dientes de arriba y los de abajo el niño se ve obligado a colocar la lengua entre los dientes para tragar.
· Maxilar superior comprimido y con forma triangular debido a que la parte anterior se adelanta por el efecto del pulgar mientras que el maxilar inferior se retrasa por el efecto del apoyo de la parte posterior del dedo. Como consecuencia aparece una gran separación entre los dientes de superiores y los inferiores. Produciendo alteraciones en la oclusión (mordida), provocando que está se abra.
2. A nivel dental Por la presión del dedo. Los cuatro dientes frontales se van a desplazar hacia fuera y hacia delante.
3. Otras alteraciones
·  Deformidad de los dedos con hiper extensión de los mismos, formación de callos e infecciones alrededor de las uñas.
·   Un mayor riesgo de enfermedades infantiles contagiosas.
·   En algunos casos el niño puede presentar problemas de lenguaje.

http://clinicadentalannaballester.blogspot.com.es/2012/09/mi-hijo-se-chupa-el-dedo-cuando-es-un.html

viernes, 29 de noviembre de 2013

EL USO DEL CHUPETE Y LA DENTICIÓN



El reflejo de succión es innato en los bebés, además de vital. Gracias a su necesidad de succionar puede alimentarse durante sus primeros días y también le tranquiliza y le da seguridad.

Sin embargo, la succión está programada para ejercer sólo durante un periodo de tiempo determinado y luego extinguirse progresivamente a medida que aparecen los dientes de leche y el niño adquiere un patrón de alimentación masticador y deja atrás un patrón succionador.

Las secuelas de los hábitos de succión prolongada  se relacionan con maloclusiones, especialmente con la boca abierta permanente, y mordida invertida..

La primera es la más común y tiende a mejorarse al suspender el uso del chupete, siendo la última más grave y permanente y requiere de la intervención del odontopediatra. para ofrecer a la familia la información necesaria acerca de las consecuencias del hábito y para determinar la necesidad de tratamiento a seguir.

También en los niños que prolongan el uso del chupete se observa mayor número de caries en su boca, ya que al comer, el chupete está en contacto con restos alimenticios y bebidas azucaradas.

   Con relación al uso del chupete merece la pena saber que:
  • Nunca se debe mojar el chupete en miel u otro líquido azucarado.
  • Si el bebé utiliza el chupete para dormir, retírarlo de su boca con suavidad una vez esté dormido, luego cerrar sus labios.
  • Tanto la tetina como el resto del material del chupete deben ser blandos y flexibles para no causar irritaciones en la mucosa bucal del pequeño.
  •  La tetina debe garantizar la menor incidencia posible en el paladar y provocar la menor abertura posible de la boca, por lo que su tamaño no deberá exceder los 3 cm.

martes, 26 de noviembre de 2013

¿CUÁNDO APARECE EL PRIMER DIENTE?


¿Cuándo aparece el primer diente?


La salida de los primeros dientes es en la mayoría de los niños se produce entre el quinto y octavo mes.

Sin embargo algunos bebés pueden presentar su primer diente a los 3 meses o al año, dependiendo de factores hereditarios. Y aunque estos dientes provisionales serán reemplazados por otros definitivos le serán de gran utilidad durante muchos años, no sólo para masticar, sino para hablar y reservar el espacio en la mandíbula para los permanentes.

¿Cuáles son los síntomas de la dentición?


Uno o dos meses antes de salir el primer diente, algunos bebés empiezan a llevarse a la boca todo lo que cae en sus manos y a mordisquearlo con ansiedad.

Si el bebé padece un babeo más fuerte de lo habitual también puede ser una señal.

En algunos niños se inflaman las encias y si el padre o la madre las tocan, pueden palpar el diente que está por debajo.

Las babas humedecen, irritan y enrojecen las mejillas y el entorno de la boca.

A medida que la inflamación de la encía aumenta y el borde cortante del diente se acerca a la superficie, el dolor puede ser más constante.

Algunos bebés sufren de pérdida del apetito y alteraciones en el sueño.


¿En qué orden aparecen los dientes?



¿Cómo puedo aliviar las molestias del bebé?

·   Mantén su cara siempre limpia y seca. El contacto de la baba con la piel del bebé puede causar irritación.
·    Pon un empapador en su almohada mientras esté durmiendo para que absorba sus babas.
·    Masaje de encías: Frota las encías del bebé con la yema de un dedo limpio.
·  Ofrece al bebé algo que él pueda morder, una goma dura, aros y anillos de goma o mordedores fríos. Los líquidos o alimentos frios le ayudaran a calmar el dolor y la inflamación. 
·   Si esas medidas son insuficientes, se puede frotar la encía con un gel para encías o unas gotas de solución tópica.

·    Siempre bajo la autorización del pediatra, se puede pueden suministrar analgésicos, antiinflamatorios o antipiréticos, en el caso de que el bebé esté muy irritable o tenga fiebre.


sábado, 23 de noviembre de 2013

ALGUNAS PREGUNTAS FRECUENTES EN ODONTOPEDIATRIA

¿Cuándo debo llevar a mi hijo al dentista por primera vez?


Cuando el niño cumple un año es el momento ideal para llevarle al dentista porque normalmente se puede ir orientando tanto al niño como a los padres de los hábitos alimenticios, higiene y darles pautas preventivas. Así el niño se va familiarizando con el dentista.

¿Cuándo debe empezar mi hijo a cepillarse los dientes?


Desde que le sale el primer diente es conveniente pasar una gasa frotando las encías y los dientes que les vayan saliendo.
Hasta los 6 años, los padres tienen que ir enseñándoles y entrenando a los pequeños para que vayan adquiriendo destreza manual. 
De 6 a 10 años Los niños deben cepillarse los dientes solos y los padres deben supervisar el cepillado. 



¿A partir de cuando puede aparecer la caries?


La caries de la primera infancia o "Caries del Biberón" puede producirse desde el mismo instante en que aparecen los primeros dientes en la boca del niño. Pero, el factor tiempo también tiene un papel importante. Cuanto más se tarde en iniciar los procesos de higiene dental, más probabilidades tendrá el niño de presentar caries.

¿Qué medidas puedo tomar para prevenir la caries de mis hijos? 


Hasta el primer año de edad, basta limpiar los dientes con una gasa humedecida. A partir de los dos años se introduce el cepillo de dientes, de cabezal pequeño y cerdas suaves.  La cantidad de pasta ha de ser mínima.

La fluorización, bajo control del odontopediatra, es un método muy eficaz de prevención de la caries ya que remineraliza el esmalte de los dientes y los protege frente a agresiones externas.
Sellar las muelas definitivas cuando salgan reduce el riesgo de padecer caries ya que se reduce la profundidad de los surcos de las muelas.
El niño no ha de dormir NUNCA con el biberón impregnado en líquidos que contengan azúcar ya que se puede desarrollar la "caries de biberón".